La guerra de los golfos sí ha tenido lugar
En la era píxel, las huellas del crimen perfecto siguen siendo materiales. Baudrillard se equivocaba. La guerra de los golfos sí ha tenido lugar. A los papeles de Bárcenas, se suman ahora los papeles de Eufemiano Fuentes. La corrupción y el dopaje como sistema. Como sistema precario. Escrito a mano, como si fuesen pervivencias de un tiempo pasado, como si el crimen funcionara con una temporalidad otra, con formas caducas. Huellas del cuerpo. Y sin embargo, la explicación de esa huella de lo real sigue estando en la pantalla. El cuerpo se quita de en medio para evitar que salpique la mierda. Non olet. Noli me tangere. Y ya nadie cree nada si no toca lo real. Hemos entrado en un régimen extraño de las imágenes. Huellas materiales, comparecencias inmateriales. No sé, es todo muy extraño. Habrá que pensarlo con detenimiento.
Lo que está claro es que, en según que casos, ser un sin papeles puede ser una ventaja
ResponderEliminar...sí, pero el PROBLEMA REAL sigue siendo EL PARO.
ResponderEliminar(sí, pero)
Pero el PARO tiene su orígenes, precisamente, en esta casta maldita que son los políticos... No hay mucha diferencia ya entre lo que sucede día a día en esta maravillosa democracia y Chicago años veinte... o Atlantic city años 20
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