José María Merino, La Glorieta de los Fugitivos (Minificción completa) Páginas de Espuma, Madrid, 2007. 240 pp. 15 € Microrrelato, minificción, minicuento, ficción hiperbreve... no parece estar demasiado claro cómo nombrar este género literario que transita entre el aforismo, la poesía, el haiku y el relato llevado a su mínima expresión (y a su máxima condensación). Lo que sí parece cada vez más claro es que, de un tiempo a esta parte, su uso se ha extendido hasta límites insospechados. Quizá los ‘tiempos que corren’, rápidos y veloces, en los que apenas tenemos tiempo para sentarnos a leer, han contribuido al éxito de las fórmulas breves. Y quizá por eso muchos son los escritores que han comenzado a cultivar este género ya no de modo subsidiario, como un apunte o un divertimento, sino como un fin en sí mismo. Uno de esos escritores es José María Merino (A Coruña, 1941), cuya preocupación por los géneros chicos de la narrativa es conocida desde tiempo atrás. Aunque también ha cultivad