[Publicado originalmente en Salonkritik ] He encontrado al fin la foto. Ha sido después de acabar la lectura de El libro uruguayo de los muertos . Quizá hasta ese momento no me había puesto a buscarla con detenimiento. Por alguna razón, estaba convencido de que fui yo quien la tomó y creía que estaba en alguna de mis cámaras. Sin embargo, tras cerrar el libro de Bellatin, al intentar dar sentido a lo que allí ocurre con los muñecos y las fotografías, he recordado que me la enviaste por email. “Las fotos que voy tomando están cada vez mejor y, curiosamente, como si estuvieran relacionados, los textos que redacto carecen de una manera creciente de energía.”[1] Creo que te lo dije ya, el protagonista de mi novela está inspirado en Mario Bellatin. No del todo, pero sí bastante. He cambiado la prótesis por unos tatuajes por todo el cuerpo, pero la cabeza rasurada, las camisas largas, los pantalones y las babuchas le pertenecen. También su manera de actuar. Diría que mi performer
Cuaderno de bitácora de Miguel Ángel Hernández. Reflexiones apresuradas sobre arte, literatura y cultura visual.