De Balzac a Peter Handke
El otro día le di una conferencia a Ángel. Él era el único público de la supuesta conferencia que tenía que impartir sobre Balzac. Así que, más que una conferencia, fue una confidencia. De todos modos, la cosa no fue demasiado grave. Y es que tenía pensado decir que no iba a hablar de nada, que, como estaba sobrepasado por la experiencia, se me había producido un colapso lingüístico y que sólo podía eludir la responsabilidad del habla. Además, a última hora había decidido que, en lugar de no hablar de Balzac, no iba a hablar de Paul Auster, aunque al final, en lugar de eso, no hablé de Peter Handke. Me sentí un Bartleby cualquiera.
Otro día que no vayas a dar esa no conferencia no me avises y volveré a no ir.
ResponderEliminarO no...
Y además, un Bartleby que no acude a sus citas de los martes por la noche.
ResponderEliminarYa te daré yo a ti vianda sólida.
Curioso... me hubiera gustado ser ese único público.
ResponderEliminarLa próxima vez puedes probar con un título más estimulante para la conferencia. Algo así como:
"La no homosexualdad de Balzac". Tal vez así algún despistado acabe cayendo en la trampa.