Reencuentro

Después de un largo período, hoy he vuelto a ver mi rostro en un espejo. Ha sido fugaz, apenas un segundo, el tiempo que la estaca ha tardado en atravesar mi corazón.

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Comentarios

  1. Joé macho, lo tuyo es puro optimismo.

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  2. Habría que ver como te sienta a tí que te despierten y sin darte los buenos días ni traerte un vasico de leche con colacao y unas galleticas maría ni ná te endilgasen una estaca de madera de pino en tol pecho... ;-)

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  3. A caballo entre el catorce y el quince y como todo los dias con la penitencia que me he impuesto ogeo tu corta nota,todavia estoy estremecida.
    Que suerte tienes tu, que aunque sea por una sola vez te mirastes en un espejo y este te devolvio tu imagen verdadera, razón más que suficiente( a mi entender) para hacer uso de la estaca.
    Cuantas amarguras tienen que circular por tus coronarias para sentirte así.
    Te aconsejo- que si como presumo- no encontrates la estaca, pintes de rosa o negro todos los espejos que encuentres, así descansaras y te libraras de tu verdadera imagen

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  4. La verdad es que desde que me clavé la estaca la vida me ha cambiado por completo. Se puede decir que soy otro. Más muerto que antes, es cierto. Pero también más tranquilo. Y lo mejor es que, en mi descanso eterno, puedo comer papas con alioli. Aquí se cumplen los deseos, por raros que éstos sean.

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  5. Fantástico. ¿Hay una forma mejor de ponerse a trabajar? Lo dudo. Hipólito Navarro también tiene un hiperbreve estupendo acerca de un vampiro, escrito a partir de un párrafo de su única novela. No recuerdo cómo se llaman ni uno, ni la otra, pero tú que conoces gente bien, a lo mejor se lo podías pedir y hacérnoslo llegar.

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