Ya visto/ya sufrido

Mi madre se muere y yo no sé hacer otra cosa que escribir en este blog. Pocas son las esperanzas que nos da el médico, aunque, muy en el fondo, quizá alguna pueda existir. Me dicen que me aferre a eso último, a ese mínimo coeficiente de posibilidad. Pero ya hice eso una vez. Y me encontré con dos muertes, mi padre y mi utopía.

Ahora todo parece repetirse. Y sólo me vienen a la cabeza cosas vividas. El dolor como déjà vu. El eterno retorno de lo mismo, pero implementado por la consciencia.

De nuevo, la UCI. De nuevo, mi mano agarrada en el tránsito. De nuevo, el tiempo lento, espeso, el sufrimiento a cámara lenta. De nuevo, la espera. De nuevo, la distancia como único antídoto. De nuevo, la escritura como anestesia.

Comentarios

  1. Creo que es cierto eso de que el sufrimiento compartido (aunque sea con la blogosfera) se lleva mejor: no puedo decirte nada más que rezo por vosotros.
    Fdo: visitante de blogs colindantes

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  2. Me uno a los rezos y te mando todo el ánimo que seas capaz de aceptar.

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