Ayer, de camino a la conferencia de Bourriaud, escuché a lo lejos cómo una niña pequeña le decía a otra: "Te cuento una adivinanza: ¿Por qué hacen papel los papeleros?". Esperé unos momentos para saber la respuesta. Pero la otra niña no contestó, y, tal como están las cosas, consideré peligroso seguirlas hasta que se desvelase el enigma.
Luego, mientras Bourriaud hababla de la heterocronía y el tiempo múltiple, yo seguía con la adivinanza en la cabeza. Aún ahora la incógnita me sigue atormentando, aunque comienzo a intuir que la respuesta tiene que ver con algún fatum romántico. Un destino oculto, el de ser papelero, causado por alguna condena olímpica. Seguramente los papeleros eran árboles y algún dios griego los condenó a cortar y empaquetar a sus hermanos para toda la eternidad. O qué se yo.
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Luego, mientras Bourriaud hababla de la heterocronía y el tiempo múltiple, yo seguía con la adivinanza en la cabeza. Aún ahora la incógnita me sigue atormentando, aunque comienzo a intuir que la respuesta tiene que ver con algún fatum romántico. Un destino oculto, el de ser papelero, causado por alguna condena olímpica. Seguramente los papeleros eran árboles y algún dios griego los condenó a cortar y empaquetar a sus hermanos para toda la eternidad. O qué se yo.
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Es una adivinanza sin solución.
ResponderEliminarSe lo pregunta el Sombrerero Loco a Alicia.
Para haber descubierto la respuesta quizá debió usted haber seguido a la niña hasta su País de las Maravillas y si un agente de la autoridad le hubiera requerido de explicaciones por su sospechso comportamiento, haberse sacado el reloj, haberlo mirado y haber salido corriendo hacia su madriguera gritando "se me hace tarde, se me hace tarde"!!!!