Ir al contenido principal

In the mood for SOS 4.8

Apenas queda una semana para el SOS 4.8 y yo ya he encargado mi pack de clones para poder asistir a todo lo que me interesa. Faltan siete días y ya me ha entrado la ansiedad.

Música y Arte, sí, pero sobre todo Voces, que este año está sembrado –nunca mejor dicho–. Y es que, aunque esta edición no cuente con la nómina de grandes popes extranjeros (a excepción del gran Frederic Martel, autor de Cultura Mainstream, un libro excepcional), la gente y los temas de este año son como para no perderse nada. Se ha hecho una programación basada en la potencia de los contenidos (la ficción televisiva), y se ha contado con figuras centrales del ensayo y la literatura contemporánea en español (Ferré, Fresán, Carrión, Balló...). La verdad es que Jordi Costa, el comisario de Voces y Arte, se lo ha currado y le ha quedado un programa genial –aunque lo mismo digo todo esto llevado por la pasión y por tener el honor este año de formar parte de esta sección

El caso es que a mí me toca doblete. El viernes, a las 18h, estaré en el Pecha Kucha Night, y durante 6 minutos y 40 segundos hablaré de sostenibilidad temporal (básicamente de El artista como historiador benjaminiano, mi libro por venir). La verdad es que condensar en ese tiempo y en 20 diapositivas mi investigación de los últimos dos años va a ser difícil. Pero lo mismo me sirve para aclararme yo mismo y darme cuenta de lo que he estado haciendo en este tiempo –aunque no sé si quiero saberlo–.




Y el sábado, a las 17:30, intervendré en la mesa Temporalidades discontinuas: Lost, Fringe y la pulsión de pasado, con Agustín Fernández Mallo, Eloy Fernández Porta y Javier Moreno. Mejor compañía imposible. Aquí hablaremos de Perdidos y los saltos en el tiempo; de Fringe y los universos paralelos... pero también la pulsión de pasado, es decir, la tendencia a lo viejuno, a la ur-tecnología que encontramos tanto en el laboratorio de Walter Bishop como en la iniciativa Dharma; y de esa suerte de retromanía que caracteriza la cultura contemporánea.

Y luego está la parte de Arte, que también tiene una pinta genial. Lo que ya no sé es si podremos ver algo con tanta voz que hay que escuchar. Y hablando de escuchar, por supuesto, está la música –que en el fondo es lo que lo mueve todo–. A eso es a lo que al final va uno. A escuchar a Mogway, a Pulp, a los Magnetic Fields... cada cual elige los suyos. Yo, particularmente, me muero de ganas de escuchar a Yuck. Georgia y The Wall fueron parte de mi banda sonora en Ithaca durante el semestre pasado. Y me hace mucha ilusión verlos el sábado a las 19:15. Pero, cosas del destino, veremos a ver si al final no acabo perdiéndomelos. Porque, o somos muy puntuales, o me da a mí que a las siete y cuarto todavía voy a estar liado con Fringe y Lost. Va a ser acabar de hablar y salir corriendo para dar botes frente al escenario.

La verdad es que no sé cómo lo voy a hacer. Por eso he encargado ya el clon. Me han dicho que en mi caso lo mismo tarda algo más por el tamaño y el peso, pero que casi seguro que estará para el fin de semana. Eso sí, me vendrá sin gorra y tendré que tunearlo yo en casa. Camisa negra, pantalones vaqueros, gorra gris, bolso cruzado y zapatillas. Espero que nadie note la diferencia. Aunque supongo que a ciertas horas de la noche eso de ver doble tampoco va a ser demasiado extraño para muchos.

Más información aquí

Comentarios