Llevo ya varios meses incapacitado para la ficción. Los textos académicos y la burocracia universitaria ha conseguido llevarse la inspiración (o lo que sea eso). Hoy he intentado retomar la escritura, pero parece que la creatividad se me ha ido de vacaciones. Mientras tanto, seguiré leyendo, y confiando en que la cosa vuelva por sus fueros.
Cuaderno de bitácora de Miguel Ángel Hernández. Reflexiones apresuradas sobre arte, literatura y cultura visual.
Una auténtica pena. No cedas a la tentación de alejarlo todavía más
ResponderEliminarNos conformamos con que dejes de aporrear el piano, jajaja.
ResponderEliminarBesos,
G.
Com-parto el sentimiento sin muchas ganas de hacerlo.
ResponderEliminarLa academia tendría que llevar un anuncio de advertencia, como el de los cigarrillos... Sólo que no entiendo como podría ser la academia una fijación oral u otra cualquiera.
En fin, saludos destemplados.
parece que tú no te das cuenta, de que incluso la más sobria de tus prosas es puro poema.
ResponderEliminarAsí que por eso no te preocupes, puedes respirar tranquilo
Muchas gracias por vuestros comentarios. La cosa sigue estancada, esperemos que remita pronto.
ResponderEliminarPara la falta de inspiración, que no es otra cosa que la ausencia de motivos, tomate un té de tila, sin respirar, con la mano izquierda, si eres diestro, o con la derecha si eres siniestro. Luego investiga de donde salio la palabra siniestro, que se supone oscuro, tenebroso, horrible..., en pocas palabras, siniestroso.
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