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Mostrando entradas de mayo, 2013

Feria del libro

Queridos amigos, este sábado 1 de junio me estreno en la Feria del libro de Madrid. Estaré firmando –lo de firmando es un decir– «Intento de escapada» entre las 19 y las 21h en la caseta 300 (librería Antonio Machado). Imagino que la cosa se va a parecer demasiado a «Esperando a Godot». Esperando al lector, casi habría que llamarlo. Así que si os queréis pasar aunque sea para contar unos chistes, dar apoyo moral o ayudar a organizar la cola de Falcones –que firma a la misma hora– estaré más que encantado de encontraros por allí.

He muerto y he sentido pena por mí

Esta noche he soñado que he muerto y ahora siento mucha pena por mí. He soñado a veces que mueren los otros, y lloro, y sufro, y me despierto con lágrimas en los ojos  También he soñado que voy a morir, que todo se va a acabar de un momento a otro, pero siempre, antes de que eso suceda, me despierto sobresaltado y con el corazón acelerado. Morir en un sueño es despertarse. Pero esta noche ha sido diferente. Esta noche he sentido morir. Me diagnosticaban una enfermedad extraña y me daban siete minutos de vida. Siete minutos que han durado casi una eternidad. Una vida, prácticamente. Una eternidad en la que poco a poco me he ido haciendo consciente de que todo estaba a punto de finalizar. Me he despedido de los míos. He hecho las paces con Dios. He vuelto a rezar después de muchos años en mi vida. Y me he preparado para morir. En paz, aceptándolo de buen grado. Después, he muerto. He sentido que todo se apagaba, poco a poco, que ya no me podía mover, que ya no podía ver y que ya no p

El museo como puerta

Publicado originalmente en El cultural En Punto Omega , Don DeLillo describe la experiencia de un visitante que se encuentra en una galería frente a 24 Hour Psycho, la obra de Douglas Gordon que consiste en la ralentización del célebre filme de Alfred Hitchcock hasta llegar a veinticuatro horas. En la sala, protegido por la oscuridad y bañado en la luz de las imágenes, el protagonista de la novela de DeLillo tiene la sensación de habitar un tiempo diferente y de encontrarse frente a un modo de percepción alternativo al de la vida cotidiana. Las obras de Douglas Gordon suelen provocar ese efecto en el espectador. Pero esa sensación de interrupción y temporalidad alterada, ¿sería la misma si en lugar de enfrentarnos a ellas en una sala de exposiciones lo hiciéramos en nuestra televisión o en el ordenador? Probablemente no. Porque la obra es el vídeo, por supuesto, pero la experiencia que propone necesita la presencia de un cuerpo en un espacio. Y lo que ocurre de modo evidente con la o

Matadlos a todos, Dios reconocerá a los suyos. Consideraciones sobre el retorno de los zombis

Esta semana he participado en el C-FEM, el Festival de Cine Fantástico Europeo de Murcia , con una charla sobre zombis. Yo no soy un experto en el tema, ni mucho menos, pero sí es cierto que me apasiona. Quizá por eso acepté la invitación y preparé algunas notas sobre las que improvisé un poco. Algunos me han preguntado si se grabó la intervención. Afortunadamente, parece ser que no. Pero ante las peticiones de los fanáticos del tema, y sin que sirva de precedente, voy a colgar aquí las notas que llevaba para la conferencia. Lo hago a sabiendas de que se trata de un material precario, sin editar, lleno de reiteraciones, repeticiones, cosas dadas por sabidas y otras muchas que eran tan sólo apuntes para improvisar y comentar durante la charla. Aun así, como no creo que vaya a publicar esto en ningún lugar –sobre todo porque no tengo tiempo de ponerme a trabajar en serio sobre el material–, lo dejo en este limbo digital. Lo mismo alguna idea puede tener sentido y todo. Eso sí, os ruego q

Democracia

Reseña publicada originalmente en Otra parte semanal Hace poco más de un año, el escritor español Isaac Rosa observaba que, frente a la avalancha de ensayos sociológicos y políticos sobre la indignación y las protestas contemporáneas, no había un panorama narrativo que se hiciera eco de lo que estaba ocurriendo en España. “¿Dónde están las novelas de la crisis?”, se preguntaba. Curiosamente, como si su llamamiento hubiera sido escuchado –o quizá porque esos libros estaban escribiéndose–, de un tiempo a esta parte las mesas de novedades se han empezado a llenar de novelas que, con mayor o menor realismo, han comenzado a dar buena cuenta de las transformaciones económicas del país y de la atmósfera de indignación y crispación en la que los españoles estamos inmersos. Novelas tan distintas como  El público , de Bruno Galindo, o  Eres el mejor, Cienfuegos , de Kiko Amat, por mencionar tan sólo dos ejemplos, atienden a la situación real del país, al paro, a la pérdida de credibilidad d

Una vestidura incómoda

De nuevo, no encuentras el tiempo para sentarte a escribir. Apenas unos segundos. Quieres escribir algo. Lo que sea. No importa el contenido. Sólo escribir. Poner palabras una detrás de otra. Casi como los minimalistas. Como Donald Judd. Una cosa detrás de la otra. Sin pretender nada. Sin pretender que esto se entienda. Abstracción. Casi. Un trazo. Un gesto. Lo que eso sería en la pantalla. Cómo hacer un trazo en la pantalla. Cómo hacer un gesto sobre el teclado. Igual que un pintor. Dar unos golpecitos, automáticos. Y que salga esto que está saliendo. Este post que sólo sirve para desentumecer los dedos. Y ya está. Y poco más. Y quizá para sentir que este espacio, este no(ha)lugar, sigue siendo un sitio para poder hacer lo que quieras. Y para acabar escribiendo esto. Así. Sin más. Al final del día de la madre. Del día en el que, otro año, no has podido felicitar a tu madre. El día en el que sientes que la herida se reblandece, que algo te muerde por dentro. Que hay un vacío, un abismo